NO ME LLAMES DOLORES, LLAMAME LOLA

Esto es lo que le debe decir la señora De Cospedal a su jefe supremo, el Sr. Rajoy. Pero para llegar a estas confianzas, doña Lola, ha tenido que hacer trabajo sucio y quitarle al susodicho mucha "mierda" de encima. La "pobre" (alguien la ha llamado alguna vez "La Bien Pagá", por lo de sus multiples salarios) ha tenido que apagar muchos fuegos dentro de su partido, bueno, mas bien, intentar apagarlos, porque mientras quedan rescoldos se pueden sacar ascuas.

Pues bien, para intentar apagar uno de esos fuegos, se le ocurrió la feliz idea de acusar publicamente, desde una playa e "interrumpiendo" sus plácidas vacaciones, al gobierno de España de realizar escuchas ilegales a la oposición, si es que se les puede llamar así. Ahora resulta que un juez le ha llamado a declarar por esto, otra cosa es que Doña Lola acuda esta vez a la cita. Eso esta por ver.